El pase en el baloncesto implica la habilidad de transferir la pelota a los compañeros/as de equipo de manera precisa y eficiente. Los ejercicios de pase incluyen el trabajo en diferentes tipos de pases, como los pases de pecho, los pases picados y los pases por encima de la cabeza. El buen pase es un componente crucial del juego en equipo efectivo, ya que facilita el movimiento del balón y crea oportunidades de anotación.